Ingredientes:
Masa
400 grs. de harina
250 grs. de cerveza
50 grs. de aceite
5 grs. de levadura liofilizada
10 grs. de sal
Aceite para untar
Azúcar
Una copita de ron, anís o moscatel
Esta receta la suelo preparar en la Thermomix en un par de minutos está hecha, simplemente poniendo los líquidos durante un minuto a 40º velocidad 1, abrimos y añadimos la harina, levadura y sal y otro minuto velocidad espiga sin temperatura. Sacamos la masa la amasamos un poco con las manos y dejamos reposar entre media y una hora, pero como a mi me gusta la masa muy fina casi no hace falta reposo.
Para prepararla de forma tradicional es simplemente mezclarlo todo, amasar con las manos hasta ver una masa homogénea y lisa, la dejamos reposar y la tenemos lista.
De ésta cantidad salen 16 cocas pequeñas, si no queréis tantas, las podéis congelar.
Cada bola la estiro con el palo, se puede dar forma alargada o circular, la unto con un chorrito de aceite de oliva virgen extra suave y le echo bastante azúcar por encima. En cada bandeja caben 4 individuales, también se pueden hacer cuatro grandes.
Introducimos las cocas en horno ya calentado a 200° con calor arriba y abajo durante 15 minutos, han de quedar tostadas, pero no perderlas de vista porque se pueden quemar en un momento.
Rápidamente las sacamos del horno y le echamos un chorrito de ron, anis o moscatel (lo que más nos guste, o tengamos en la despensa) por encima, veremos que al contacto con el azúcar caliente se pone a hervir, ésto es lo que dará la consistencia de vidrio o crujiente.
El resultado es que no puedes dejar de pellizcar y comer, por eso aunque creáis que son muchas, no dudéis en prepararlas y veréis como no dejan ni las migajas.